Solo los medios controlados y subvencionados por el equipo de gobierno obvian la gravedad de la noticia y dan pábulo al alcalde que sigue sin aclarar la falta de transparencia
Las cloacas periodísticas no sólo existen a nivel regional o nacional, como se sabe desde siempre y como hemos experimentado con mayor gravedad durante los últimos tiempos.
Los gobiernos municipales también saben utilizar estas cloacas en su beneficio, especialmente los de extrema derecha, como el de Colmenar Viejo, que tiene capacidad para tratar de silenciar medios locales que no consideran de su línea y son reacios a dejarse controlar. Para ello se les ataca por la única vía que les hace daño, negándoles publicidad municipal e invitando a sus clientes a que dejen de anunciarse.
Este hecho lo hemos vivido durante los años de pandemia donde se atacó despiadadamente a dos medios locales, Clamores de la Sierra y Diario Colmenar, simplemente por el hecho de informar de lo que a ellos no les interesaba. Uno evidentemente desapareció, pero el otro sigue en pie.
Este acoso y derribo a ciertos medios locales llegó de la mano de su asesor y amigo personal, contratado a dedo como cualquier cargo de confianza. La llegada de Borja García, exconcejal del PSOE de Colmenar, Responsable de Comunicación de Ciudadanos de Madrid, actualmente asesor y persona de mayor confianza del alcalde del PP de Colmenar y como ya se comenta posible futuro candidato de la formación fascista de Vox a la alcaldía, ha sido el eslabón que ha cambiado la trayectoria política de Jorge García y aquel talante aperturista y dialogante que ofrecía cuando desempeñaba la concejalía de Cultura y que incluso contó con las alabanzas de la oposición.
El poder cambia a las personas
Pero el tiempo ha pasado y la llegada a la alcaldía, tras la dimisión de Santamaría y posteriormente, tras las últimas elecciones, de la mano de los tránsfugas huidos de Ciudadanos y posibles futuros integrantes de la candidatura del PP, si el nuevo candidato así lo estima conveniente, ha generado un cambio total en su manera de proceder políticamente.
La publicación de corrimiento de tierras del IV Vaso de Vertedero, dada en exclusiva por Diario Colmenar, que tanto la Comunidad de Madrid, como la Mancomunidad y de manera especial, el gobierno municipal que se sostiene a base de una lacra política como el transfuguismo, trataban de ocultar, ha vuelto a destapar las cloacas periodísticas de la localidad. A pesar de la noticia y de la gravedad de los hechos, basados en un informe oficial, los medios controlados y subvencionados por el propio equipo de gobierno, tanto radiofónicos como escritos, continúan sin querer hacerse eco de la noticia y todo su contenido, dando exclusivamente pábulo a las irracionales y titubeantes declaraciones de Jorge García, con las que pretende sellar este corrimiento de tierras a través de vídeos y entrevistas preparadas de antemano.
Que Jorge García es uno de los alcaldes más devaluados de la extrema derecha madrileña es una realidad que no pasa desapercibida para nadie, especialmente al no contar ni con la confianza de la presidenta regional y dueña absolutista del PP madrileño.
Videos en redes sociales
Este confiar su destino político en manos del su amigo personal, Borja García, también le ha hecho distanciarse de su segundo a nivel político, y la figura más ultra de la formación de extrema derecha, Carlos Blázquez, quien, poco a poco y sin tantos vídeos como su jefe, va ganando enteros para perfilarse como cabeza de lista de la candidatura del PP local en las próximas elecciones municipales y desbancar al que antaño fuera uno de sus mejores aliados.
Mientras tanto, el equipo de gobierno apoyado en el transfuguismo, continúa sin dar explicaciones sobre la gravedad de los hechos ocurridos en el Vertedero y que, hasta que no salió a la luz de la mano del Diario Colmenar, trataron de ocultar, no solamente a los grupos de la oposición, sino, a la propia población colmenareña y eso es lo más grave.
Mientras el alcalde ciñe su futuro a la publicación de videos y fotografías, en las que los vecinos le preguntan en todos los Facebook que publica sobre el cierre del Servicio de Urgencias de Atención Primaria (SUAP), que ya lleva dos años y medio en esta situación, de la misma forma que como ocurre con este accidente del vertedero, el silencio del alcalde y de todos los miembros del gobierno se hace cada día más angustioso.
Cabe hacerse una pregunta. ¿Están todos los concejales/as del equipo de gobierno de acuerdo con esta forma de proceder? Es de suponer que sí, ya que ninguno ha dicho ni “pío”. Aunque quizá sea por mantener su suculento sueldo de las arcas municipales y por no perder puntos de cara a las próximas elecciones municipales y que puedan ser excluidos de la candidatura. Y es que los sueldos que cobran por mantener el silencio, no lo cobrarían en ningún otro puesto de trabajo de la calle, a pesar de que ciertas concejalías (Cultura, Seguridad Ciudadana, Sanidad, Medio Ambiente, Obras o Hacienda) no se pueda apreciar su trabajo municipal por ninguna parte.
Una pena.